jueves, 8 de enero de 2009

Cóctel molotov: ser hipocondríaco y estar todo el día navegando en Internet

Ando yo estos días "malamente" por una leve molestia de oído que, porque he cogido el toro por los cuernos y he ido finalmente al médico, que si no, en mi cabeza termina siendo una afección grave que sólo padece 1 de cada 7 millones de personas en el mundo y que está muy concentrado en la población asiática.

No soy dado a ir al médico, así que, cojo mis síntomas, los meto en el marisabidillo de google y ¡¡¡voilá!!! Tú lo que tienes es incurable.

Todo encaja. Sobre todo cuando, por si la enciclopedia médica se equivoca, recurres a los foros de mujer10, cómo ser mamá, etc. etc. Siempre hay alguien que ha tenido algo que se parece sospechosamente a los síntomas que tú percibes, y misteriosamente, ese alguien ha terminado siendo intervenido quirúrjicamente para estirparle un peligroso pelo que no había roto la piel y se dirigía directo a atravesar el corazón como si una espada fuera.

O sea, el hecho de que "los expertos" que analizan esos síntomas tengan los mismos o menos conocimientos que yo, no influye en su veracidad.

Pues con estos ingredientes, uno se maneja a diario. Todos los males del mundo creo que los tengo yo. Todos los males del mundo están perfectísimamente "documentados" en Internet.

En el autodiagnóstico habré acertado unas 3 o 4 veces (de 15.000 intentos, claro), así que ese elevado porcentaje de aciertos me reafirma en mis sospechas cada vez que "noto algo extraño" (que igual son gases, digo yo).

De hecho, en estos momentos noto un dolor abdominal situado en el bajo-vientre (casi como retortijones), dolor de espalda y piernas, mareo y náuseas... Creo que ya se lo que tengo: ¡¡¡me va a bajar la regla!!!

Vamos, o eso, o que acabo de comer lentejas.

No hay comentarios: