Pues sí. Aquí podéis ver que "la concuñá" también tuvo que pasar algo de vergüenza con ese sombrerito y ese "biberón". Ya se sabe... una despedida de soltera sin esos "complementos"... no es despedida de soltera.
De todas formas, el ridículo de la indumentaria suele ser directamente proporcional al disfrute y desinhibición del individuo en cuestión (para muestra, mirad al novio y lo mal que se lo pasó!!!).
Ahora que me fijo, según estas fotos parece que la sección femenina de la fiesta no desvarió mucho, ¿no? Aunque repasando la enorme cantidad que tenemos... veo que muy sabiamente dejaron de hacer fotos a una hora "decente" y no como la sección masculina que continuó generando pruebas (que podrán ser usadas en su contra...) de lo aburrida que fue su fiesta...
Por último, no quisiera terminar por hoy sin hacer referencia a los gorritos... jejeje
¡¡¡Me encantan!!! De hecho, si el cuñao me devuelve una de estas semanas el chaleco de chikilicuatre, creo que ya tengo disfraz para la próxima fiesta: Woody, el baquero de Toy Story
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